La vicealcaldesa, María Echávarri, se niega a incluir la comparecencia solicitada hace 7 días por EH bIldu en el orden del día de Presidencia
EH Bildu ha pedido explicaciones por la no inclusión en el orden del día de la comisión de Presidencia de la comparecencia de la alcaldesa, Cristina Ibarrola, para explicar si se aprovechó o no de la Alcaldía para promocionar a una joyería privada. La solicitud fue presentada por el grupo soberanista hace una semana, pero la presidenta de la comisión, la vicealcaldesa María Echávarri (UPN), no la ha incluido entre los temas a tratar el martes. “Es evidente que Ibarrola quiere esconderse y su número tres le da cobertura, lo que no hace sino acrecentar las dudas fundadas sobre las implicaciones reales de lo que se conoce como el caso de las joyas”, sostiene EH Bildu. “Pero que tengan claro que no lo vamos a aceptar y más temprano que tarde deberán presentar las facturas de esas joyas y dar las explicaciones oportunas ante los grupos por su comportamiento”, añadían.
El grupo abertzale había pedido que la alcaldesa aclarara ante Presidencia el uso de su imagen institucional en actos oficiales para promocionar un establecimiento privado. La negativa a incluirlo en el orden del día se une ahora a otros comportamientos “inexplicables” previos. “El tema pinta cada vez peor: pedimos las facturas de aquellas joyas para aclarar que no fueron un regalo para Ibarrola por promocionarlas y la alcaldesa se ha negado a darlas; presentamos hace más de un mes preguntas para despejar dudas sobre las relaciones de Ibarrola con ese establecimiento y no han respondido, y, ahora, pedimos la comparecencia y se niegan a darla”, relata EH Bildu. “Una vez más UPN demuestra que la transparencia es un concepto que no está en su ADN político, aunque tampoco esta vez les va a servir para esconderse”, añade.
El nudo gordiano de este affaire está en los justificantes de compra de las joyas que lució la alcaldesa en varios actos oficiales y cuya imagen fue empleada por la joyería que se las suministró para hacerse publicidad. Se trata, en concreto, de dos juegos de pendientes y una gargantilla que lució en la procesión de San Fermín, en una comparecencia oficial y en el Pobre de Mi. Además de certificar que las joyas no fueron un regalo, el grupo abertzale pide respuesta a otras tres cuestiones: si las joyas fueron o no “préstamos puntuales para determinados eventos” con “relación contractual”; si la alcaldesa dio permiso para la publicación de las fotos promocionales, y, finalmente, si Ibarrola respaldó o no el uso de su imagen institucional con fines comerciales.