Resalta la respuesta unitaria contra las agresiones sexistas en un año en el que la caótica gestión regionalista ha afectado, en especial, a los residuos
Pide para septiembre convocatoria urgente de la Mesa de los Sanfermines
A pocas horas del final de los Sanfermines 2023, el grupo municipal de EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona destaca el comportamiento ejemplar de la mayoría de la ciudadanía en estas fechas, lo que a su juicio demuestra “una vez más el compromiso real y la responsabilidad indudable de Iruñea respecto a sus fiestas”. “Pese a que ha habido gente que ha tratado de provocar situaciones de conflicto para sacar rédito político en unas fiestas marcadas por la cita electoral del 23-J, el civismo y el buen ambiente se han impuesto y no se ha caído en provocaciones”, destacaba la formación soberanista. “Ésta es una buena noticia pese a que haya quien hubiera preferido tener otras fotos o pese a quienes han mirado a otro lado ante una campaña de acoso a medios con un eslogan concreto firmado por la ultraderecha y coreado por el resto de la derecha”, sostenía.
La respuesta “unitaria y contundente” de la ciudadanía de Pamplona contra las agresiones sexistas ha sido otro de los temas destacados por el grupo abertzale. “Esta ciudad, encabezada por su movimiento feminista, ha demostrado una vez más su compromiso inquebrantable con la denuncia, con el respaldo a las víctimas y con la exigencia de erradicación de todo tipo de violencias hacia las mujeres y, gracias a la aplicación del protocolo del que nos hemos dotado, hemos sabido demostrar de nuevo que somos una ciudad referencial y que queremos seguir siéndolo”, destacaba.
Siguiendo en este plano, EH Bildu también ha puesto en valor la alta participación de los y las iruindarras en los actos del programa, aunque ha lamentado que el equipo de gobierno haya insistido en su “estrategia de dinamitar las iniciativas populares”. “Es evidente que las trabas puestas a determinadas peñas para poder abrir sus locales, las amenazas contra programas alternativos o los problemas puestos para habilitar espacios festivos populares responden a esa estrategia”, analizaba la formación soberanista. “Ante esta evidencia, EH Bildu vuelve a reivindicar el carácter popular de las fiestas y se compromete a trabajar sin descanso para frenar su mercantilización, relanzar los Sanfermines populares y poner en el centro de la fiesta a quienes realmente son su alma; los y las iruindarras”.
Para orquestar este compromiso, el grupo abertzale formalizará con carácter inmediato una solicitud para que la Mesa de los Sanfermines, el organismo que aúna a más de 80 colectivos que trabajan en y para las fiestas, se reúna con carácter urgente en el mes de septiembre. “La agenda de temas a tratar es inmensa, pero sobre todo de lo que se trata es de recuperar el protagonismo de un órgano que aúna a la institución con los grupos y colectivos sanfermineros, una herramienta que durante años se mostró eficaz para mejorar las fiestas y que UPN lleva años tratando de arrinconar a pesar de la petición mayoritaria para convocarla”, explicaba.
Caos organizativo y problemas con la limpieza
Respecto a la gestión que de estos Sanfermines ha hecho el equipo encabezado por Cristina Ibarrola (UPN), dos temas centran las reflexiones de EH Bildu: limpieza y caos organizativo. “En primer lugar hay que hablar de la nula y nefasta gestión que ha hecho este equipo del sistema de vaso reciclable, circunstancia que explica, en buena medida, un hecho inadmisible: el significativo aumento de los residuos, sobre todo plásticos, respecto a años anteriores”, explicaba el grupo soberanista. “En un contexto de amenaza climática y cuando más hemos de demostrar como ciudad nuestro compromiso con la transición ecológica, hacer dejación de los esfuerzos llevados a cabo durante años para reducir residuos plásticos es una grandísima irresponsabilidad sólo comparable con la falta de implicación de UPN en esta materia”, sostenía.
Respecto al caos organizativo, EH Bildu destaca los “continuos fallos de protocolo tanto en el Txupinazo como en la procesión; la tardanza en las comunicaciones; las improvisaciones en el programa y los cambios injustificados y unilaterales en algunos de los eventos”. Respecto a esto último, los casos más “sangrantes” a juicio de los soberanistas son: “Convertir el homenaje civil que se tributaba a los mayores en el Ayuntamiento en un acto religioso en la iglesia, cambiar de lugar la despedida de los gigantes y aparcar la recepción infantil para dejarla sólo en una ofrenda floral al Santo”. Pero “lo peor” de esto es que “las decisiones se han tomado unilateralmente, sin consultar, por un gobierno en minoría que ha primado sus creencias e impresiones frente a la obligación que como institución tiene el Ayuntamiento respecto al conjunto de la población, independientemente de credos”.
Finalmente, desde EH Bildu se destacaba el trabajo desarrollado por todo el personal del Ayuntamiento, pero también el de otras instituciones y servicios. “Como siempre, el alto grado de eficiencia y eficacia de estos y estas profesionales ha permitido que estas fiestas se desarrollen dentro de los cauces de la normalidad y por ello todos los que formamos parte de este Ayuntamiento tenemos que darles las gracias”, concluía.